Se estima que en el mundo alrededor de 1 billón personas presenta algún grado de discapacidad, lo que representa un 15 por ciento de la población mundial y 20 por ciento de los pobresdel mundo (Informe Mundial Sobre la Discapacidad, OMS)”
A partir de la implementación y entrada en vigencia de la Ley 21.015 de Inclusión Laboral para personas en Situación de Discapacidad (PeSD), se busca garantizar que el 1% de la dotación de las compañías tenga alguna discapacidad certificada.
En Randstad, a través de un modelo de trabajo con nuestros clientes, colaboradores y candidatos, buscamos aportar en este proceso de cambio visibilizando las ventajas que tiene transformarse en una empresa inclusiva. Así, apoyamos a las organizaciones a seleccionar empleados con discapacidad según las características del puesto, la empresa y el centro de trabajo y ayudamos a las personas a mejorar su calidad de vida por medio de un empleo que les dé un espacio en la sociedad.
Se considera que sólo en un 10% de los casos, las personas en situación de discapacidad presentan dificultades para adaptarse a su puesto de trabajo, y sólo un 8% (aprox.) presenta algún problema de productividad inicial.
Es decir, se integran rápidamente a las funciones que se les asignan y cumplen con la exigencia requerida en ese trabajo desde el instante de su ingreso (Estudio “Jóvenes, discapacidad y Empleo, Fundación Randstad España).
b) Actitud positiva y alto compromiso de los empleados:
Las personas en situación de discapacidad, suelen tener una buena disposición al trabajo y una gran motivación en su día a día. Se considera como valor mayoritario los factores personales de la persona, tales como, el talento y las capacidades del trabajador, por encima de otras variables.
c) Entrega de beneficios organizacionales:
La implementación de esta Ley, busca promover dentro de las organizaciones los valores como la diversidad, pluralidad, respeto y solidaridad.
d) Mejora el ambiente interno:
Incluir políticas de diversidad e inclusión, y además participar de proyectos de inclusión laboral, genera un impacto positivo en las diferentes áreas y equipos de trabajo de la organización. Las personas en situación de discapacidad aportan valores de tolerancia, respeto, optimismo y superación frente a diferentes incidentes.
e) Incentivos y el fomento de este tipo de empleo:
Aquellas empresas que decidan fomentar algún proyecto de inclusión laboral, pueden acceder a diferentes beneficios organizacionales (expresadas en punto posterior), como por ejemplo la obtención del reconocimiento de “Sello Inclusivo”, entregado por medio del Servicio Nacional de la Discapacidad (SENADIS).
f) Sensibiliza al resto del personal:
El acercamiento a estas personas, por lo general permite sensibilizar al personal de la empresa (interno y externo), impulsando los principios bioéticos de aceptación de la diversidad y la no discriminación.
g) Disminuye el ausentismo laboral:
Aquellos trabajadores que presentan algún tipo de discapacidad son muy poco conflictivos y tienen un ausentismo laboral igual o menor que una persona sin discapacidad.
h) Genera un mayor compromiso en la organización:
Por lo general, los trabajadores con algún tipo de discapacidad muestran una actitud más fiel a su puesto de trabajo que un trabajador sin discapacidad. Presentan una menor rotación, lo que evita gastos y tiempo de formación.
i) Permite contar con trabajadores eficientes en tareas específicas:
como por ejemplo, las personas con discapacidad auditiva son óptimos para trabajar en lugares con un alto nivel de ruido sin sufrir daños que conlleven a enfermedades laborales por esta causa. Quienes tienen Discapacidad Intelectual desarrollan muy bien tareas estructuradas y repetitivas, mientras que las personas con discapacidad físico-motora pueden ejecutar labores que requieren mantener de forma estacionaria dentro de su puesto de trabajo.
BENEFICIOS PARA LA PERSONA CON DISCAPACIDAD
Las personas con discapacidad encuentran satisfacción en su situación laboral, se sienten útiles y productivas.
Mejoran su calidad de vida.
Dejan de ser una carga económica ya que aportan ingresos al hogar.
Cambian su rutina y mejoran su estado de ánimo.
La persona con discapacidad tiene más autonomía e independencia.
Se incorpora al ámbito social.
Generan nuevas relaciones interpersonales.
BENEFICIOS PRODUCTIVOS PARA LA EMPRESA
Emplear a personas con discapacidad te genera beneficios fiscales
La contratación de personas con discapacidad, se traduce en incremento a la productividad general.
Las personas con discapacidad generalmente tienen mucha disposición para el trabajo.
Las empresas que han contratado a personas con discapacidad las catalogan como trabajadores leales y estables, con baja tasa de rotación, ausentismo y accidentabilidad.
La inclusión produce sentimientos de orgullo, mejora el ambiente laboral.
Los compañeros de la persona con discapacidad aprenden de ellas.
Una empresa incluyente es más atractiva para los inversionistas, consolida su clientela.
Promovamos juntos una cultura de inclusión laboral.